Seguro que hoy por casa tenéis bombones Ferro Rocher u otros de las mismas características, con ellos os propongo una exquisita tarta sencilla y rápida de hacer, que hará las delicias de los mas pequeños y no tan pequeños, como en mi casa que son unos supergolosos, siiiiii.... supergolosos.
Es una tarta que no necesita horno y es mejor prepararla de un día para otro, haciendo el día anterior la tarta y el mismo día la decoramos ....animaros a ella....
INGREDIENTES
Para la base:
250 g de galletas tipo maría
100g de mantequilla sin sal
1 cucharada de cacao en polvo
Para el relleno:
300g de nocilla
12 bombones
400ml de nata para montar
15 g de gelatina en polvo, o 9 laminas de gelatina neutra
225 ml de leche
80 ml de agua fría
Para el ganache:
100 ml de nata
100g de chocolate Nestle
25 mantequilla
Base:
En un robot de cocina trituramos las galletas añadimos la mantequilla y el cacao, mezclando hasta que este todo homogéneo.
Forramos la base de un molde desmontable de 20-22 cm (yo en uno rectangular) ponemos las galletas trituras y las presionamos con una cuchara dejando una base lisa, reservando en la nevera.
Relleno:
Quitamos el envoltorio a los bombones, picandolos sobre una tabla en trozos irregulares para que se noten en el relleno.
Ponemos la gelatina a hidratar 10 minutos en el agua fría.
En un bol ponemos la nata bien fría, batiéndola hasta que nos quede espesa.
Como la nocilla es bastante consistente se pone en un bol y la ponemos unos segundos en el microondas, se retira y se remueve.
Echamos la nocilla en un bol grande, agregándole la leche a temperatura ambiente, mezclando con una varillas bien hasta que este todo muy bien integrado.
Calentamos la gelatina unos 15 segundos, la añadimos a la mezcla de nocilla integrando todo muy bien.
Vamos añadir la nata primero una poca mezclando bien con movimientos envolventes, con las varillas y luego la nata restante en varias tandadas suavemente, para que nos quede bien aireada hasta que este todo mezclado, añadimos los bombones que tenemos troceados con movimientos envolventes para no quitarle el aire a la muss..
Retiramos el molde de la nevera y le añadimos la crema, limpiamos bien los bordes del molde y ponemos en la nevera hasta el día siguiente.
Ganache:
El ganache es mejor hacerlo el día que decoremos la tarta.
En un cazo ponemos la nata, cuando empiece a hervir la retiramos del fuego y ponemos el chocolate troceado dejando reposar tapado unos minutos., añadimos la mantequilla y mezclando todo bien hasta que nos quede una crema bien integrada.
Desmontamos la tarta poniéndola en la bandeja elegida o en la base del mismo molde, dejamos que entibie un poco el ganache que le vamos poniendo poco a poco por encima, decorando al gusto de cada uno con los ferrero y con nata montada con el cacao.
